El orden del universo
Crisanto Gregorio León
El orden del universo es la Voluntad Divina y se entiende por Voluntad Divina como la Voluntad o disposiciones de Dios impulsadas, sostenidas y regidas por la Omnipotencia del Omnipotente, del Creador y Señor de todas las cosas que han existido, que existen y existirán. Esta Voluntad de Dios no se entiende sólo como las directrices y asignaciones específicas que Dios desea que el hombre realice en el trayecto de su vida terrena, sino que se traduce también como Voluntad de Dios a la esencia de Dios, que se encuentra y penetra en todo lo existente y es otorgadora de la vida que lo anima y sostiene, Voluntad de Dios…es Dios.
Verbigracia, la fuerza que mantiene los astros en el cosmos, la fuerza que conserva las aguas en sus causes, el soplo de la vida, la esencia de todo lo creado, la fuerza del viento y el milagro del pensamiento, entre tantas cosas.
La sociedad actual, que pierde cada vez más valores que contribuyan a un auténtico e íntegro bienestar del hombre, donde el sin sentido de la vida se acentúa día a día , donde los vicios y el caos hacen efervescencia como en ninguna otra época y progresivamente y sin empacho son violadas las leyes de natura , lanzando a un limbo moral a la sociedad, donde incluso los avances del hombre tienden a su propia destrucción o a llenar efímeramente sus anhelos de felicidad, es el reflejo de una humanidad que ha decidido dejar a un lado y dar la espalda a los deseos de Dios e incumplir aquellas acciones específicas – los mandamientos - que Dios desea que observe con fidelidad en el transcurso de su vida, las cuales han sido pensadas por él para que el hombre obtenga siempre y en todo el mayor y verdadero bien, para sí y para los demás.
Si bien el orden del universo es la Voluntad de Dios y que él ha querido mantener como obsequio a sus criaturas, estas se han empeñado de manera deliberada o de forma inconsciente en desequilibrar y trastocar.
Para detener este oleaje impetuoso de males disfrazados de bien, para conseguir un acuerdo y verdadero orden entre los hombres y así lograr la Paz entre las naciones, que los diplomáticos muchas veces no consiguen, para que se haga realidad el respeto a la dignidad intrínseca de la persona humana, de su naturaleza y de todo lo existente, para hallar un orden mundial que erradique las miserias y por ende no tenga razón de existir la delincuencia, ni la corrupción y donde todos posean en abundancia bienes espirituales y materiales y el hombre obtenga su plena felicidad, es vital que la sociedad actual, se consustancie con esa Voluntad Divina y sea su expresión , la cual hará desaparecer y pondrá punto final a todo el mal.
Lo que le da orden al universo es la voluntad de Dios, una simple tautología nos identifica el orden del universo con la voluntad de Dios, entonces cuando el hombre ignora y no ejecuta lo que Dios quiere, altera el orden del universo porque está desobedeciendo la voluntad de Dios. De igual modo, cuando el hombre destruye las cosas creadas ataca a la esencia de Dios, que es lo que le da vida a la creación y atacando a esta esencia ataca a Dios. Por eso debemos estar en armonía con Dios, que es estar en armonía con el orden del universo, porque todo lo contrario lleva al desorden que es la destrucción.
Propongámonos para este nuevo ciclo y para siempre, obedecer y conservar el orden del universo, que es la voluntad de Dios.
Crisanto Gregorio León
El orden del universo es la Voluntad Divina y se entiende por Voluntad Divina como la Voluntad o disposiciones de Dios impulsadas, sostenidas y regidas por la Omnipotencia del Omnipotente, del Creador y Señor de todas las cosas que han existido, que existen y existirán. Esta Voluntad de Dios no se entiende sólo como las directrices y asignaciones específicas que Dios desea que el hombre realice en el trayecto de su vida terrena, sino que se traduce también como Voluntad de Dios a la esencia de Dios, que se encuentra y penetra en todo lo existente y es otorgadora de la vida que lo anima y sostiene, Voluntad de Dios…es Dios.
Verbigracia, la fuerza que mantiene los astros en el cosmos, la fuerza que conserva las aguas en sus causes, el soplo de la vida, la esencia de todo lo creado, la fuerza del viento y el milagro del pensamiento, entre tantas cosas.
La sociedad actual, que pierde cada vez más valores que contribuyan a un auténtico e íntegro bienestar del hombre, donde el sin sentido de la vida se acentúa día a día , donde los vicios y el caos hacen efervescencia como en ninguna otra época y progresivamente y sin empacho son violadas las leyes de natura , lanzando a un limbo moral a la sociedad, donde incluso los avances del hombre tienden a su propia destrucción o a llenar efímeramente sus anhelos de felicidad, es el reflejo de una humanidad que ha decidido dejar a un lado y dar la espalda a los deseos de Dios e incumplir aquellas acciones específicas – los mandamientos - que Dios desea que observe con fidelidad en el transcurso de su vida, las cuales han sido pensadas por él para que el hombre obtenga siempre y en todo el mayor y verdadero bien, para sí y para los demás.
Si bien el orden del universo es la Voluntad de Dios y que él ha querido mantener como obsequio a sus criaturas, estas se han empeñado de manera deliberada o de forma inconsciente en desequilibrar y trastocar.
Para detener este oleaje impetuoso de males disfrazados de bien, para conseguir un acuerdo y verdadero orden entre los hombres y así lograr la Paz entre las naciones, que los diplomáticos muchas veces no consiguen, para que se haga realidad el respeto a la dignidad intrínseca de la persona humana, de su naturaleza y de todo lo existente, para hallar un orden mundial que erradique las miserias y por ende no tenga razón de existir la delincuencia, ni la corrupción y donde todos posean en abundancia bienes espirituales y materiales y el hombre obtenga su plena felicidad, es vital que la sociedad actual, se consustancie con esa Voluntad Divina y sea su expresión , la cual hará desaparecer y pondrá punto final a todo el mal.
Lo que le da orden al universo es la voluntad de Dios, una simple tautología nos identifica el orden del universo con la voluntad de Dios, entonces cuando el hombre ignora y no ejecuta lo que Dios quiere, altera el orden del universo porque está desobedeciendo la voluntad de Dios. De igual modo, cuando el hombre destruye las cosas creadas ataca a la esencia de Dios, que es lo que le da vida a la creación y atacando a esta esencia ataca a Dios. Por eso debemos estar en armonía con Dios, que es estar en armonía con el orden del universo, porque todo lo contrario lleva al desorden que es la destrucción.
Propongámonos para este nuevo ciclo y para siempre, obedecer y conservar el orden del universo, que es la voluntad de Dios.
Abogado
crisantogleon@gmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario