martes, 11 de mayo de 2010

Nuestros actos nos definen
Crisanto Gregorio León


No importa quienes somos por dentro, son nuestros actos los que nos definen.
Cuando un ser humano se comporta cual saltimbanqui, para reflejar una imagen que no es la real; siempre la esencia muestra su rostro, independientemente de las acrobacias por esconderlo. Si eres bondadoso o estás lleno de maldad, tus actos te delatarán. Y toda acrobacia para ser mejor persona, fructificará en un mejor ser humano.
Si el corazón es bueno, la bondad se manifiesta sin ningún esfuerzo; y cuando el corazón es como la hiel, continuamente dejamos un sabor amargo en las relaciones con nuestro prójimo.
¿Pero podría ser un dogma afirmar que somos humanos y por tanto personas y que la cualidad de personas nos garantiza humanidad esencial?
Hay quienes definen a la gente como seres triunos; no por equipararnos con las tres divinas personas, sino porque en la complejidad de la mente humana, en la materialización de sus pensamientos y de sus acciones; cada individuo posee tres personalidades: lo que somos, lo que creemos que somos y lo que los demás piensan que somos. Algo así como remontarnos al problema del ser en la ontología Aristotélica en el deslinde de las disciplinas científicas.
Y cabría preguntarnos: ¿Cuál es el concepto que tenemos de nosotros como personas y cual nuestra finalidad para trascender como seres humanos? , ¿Qué nos diferencia de los demás personas? , y ¿Qué clase de personas somos?
Cuando mentimos o engañamos, o nos aprovechamos de la bondad o la credulidad de otros, o nos valemos de nuestras profesiones u ocupaciones para satisfacer nuestra egolatría, o en todo caso desquitarnos con otros nuestras “carencias”; no hacemos sino buscar un pretexto para dejar aflorar el verdadero “yo” que administra nuestra vida.
Y en igual sentido, cuando aprovechamos nuestras cualidades y posiciones, siendo éstas coadyuvantes para llevar la vida en armonía con todo y con todos; en vez de exacerbar las carencias de otros, sembramos el pretexto para ser felices, trascendiendo como mejores seres humanos.

Abogado
crisantogleon@gmail.com

No hay comentarios: